Todos los ordenadores permiten cambiar el dispositivo desde el que arrancar. Normalmente se puede escoger entre el disco duro, el CDROM, un diskette, o incluso lápices y tarjetas de memoria y discos duros externos. Esta configuración se almacena en la memoria CMOS, que es una memoria donde se guarda información relativa a cómo se debe arrancar el ordenador, y los parámetros de la BIOS, que es el programa que se encarga de todo lo que ocurre entre que pulsamos el botón de encendido del ordenador hasta que comienza la carga del sistema operativo.
Nota informativa
Los ordenadores más modernos, ya no incorporan una BIOS tradicional, sino que poseen otro sistema llamado UEFI. En este caso, es este componente el que se encarga de controlar el orden de arranque, y normalmente se configura en el propio sistema operativo. Todos los equipos que vengan con Windows 8 preinstalado, poseen UEFI. El arranque desde CD se deberá lanzar dentro de las opciones de configuración de Windows.
Se puede cambiar el orden de arranque de los dispositivos, es decir, el orden en el que la BIOS buscará un dispositivo de arranque, a través del menú de configuración de la CMOS. Funciona de la siguiente manera: la BIOS, cuando termina de realizar todas las comprobaciones y ha arrancado todos los servicios básicos, va a buscar el sistema operativo al primer dispositivo de arranque. Si no encuentra un sistema operativo, lo busca en el siguiente. Así sucesivamente hasta el último. Si no encuentra un sistema operativo, muestra un mensaje en pantalla y se queda a la espera de que se solucione la situación.
La mayoría de las BIOS modernas, permiten seleccionar el dispositivo de arranque, independientemente de la configuración de la CMOS, en cada arranque, para lo cual facilitan una tecla. Normalmente en F8, F10, F11 o F12. Al pulsar esta tecla durante el arranque, se nos muestra un menú en el que podremos escoger el dispositivo donde arrancar. En la documentación del ordenador, se indica cuál es la tecla exacta, en caso de existir. En la primera pantalla de diagnóstico nada más arrancar, también suele aparecer la opción, indicada como BBS Priority o Select Boot o Boot Menu.
ATENCIÓN
Una configuración incorrecta de la CMOS puede provocar que el ordenador deje de arrancar, por lo que antes de proceder a cambiar cualquier configuración, deberás de tener claro lo que vas a hacer, los pasos que tienes que dar, y lo más importante, antes de hacer nada, anota en un papel el estado actual de los parámetros. El procedimiento que aquí se detalla corresponde a las BIOS más extendidas, pero puede variar de unos ordenadores a otros. Deberás consultar la documentación de tu ordenador para comprobar el procedimiento exacto en tu caso.
Si nuestra BIOS no nos permite forzar el arranque desde un dispositivo concreto, deberemos cambiar los parámetros de configuración de la CMOS. El acceso a dicha pantalla, varía de unos ordenadores a otros. En la documentación del ordenador suele indicarse el botón que hay que pulsar para entrar en ella. Normalmente es F2 o la tecla de Suprimir. También suele indicarse en la primera pantalla que aparece nada más encender el ordenador, y que muestra las comprobaciones de la BIOS.
El aspecto de la pantalla que nos encontramos a continuación varía de unos ordenadores a otros. Pero todas constan de un juego de pantallas, menús y submenús con varias opciones. La forma de moverse entre unas secciones y otras está indicada en la propia pantalla.
En este caso concreto, los menús se encuentran en la parte superior (Main - Advanced - Security - Power - Boot - Exit). Para desplazarnos entre ellos, usamos los cursores derecho e izquierdo. La configuración de los dispositivos de arranque está en el menú Boot, por lo que mediante los cursores, nos desplazaremos a dicho menú. En otros ordenadores, puede llamarse Boot Options, Boot Priority, o puede estar dentro del menú Advanced.
En este caso, el ordenador está configurado para buscar el sistema operativo primero en los dispositivos removibles (normalmente se refiere a la diskettera), después en el disco duro, y después en el CD-ROM. Tenemos que cambiarlo y hacer que CD-ROM sea la primera opción. Como nos indica en la parte derecha, deberemos situarnos sobre CD-ROM con los cursores, y deberemos pulsar la tecla + para moverlo hacia arriba.
Una vez que tenemos la configuración como nos interesa, deberemos guardar los cambios que hemos realizado. Nos desplazamos al menú Exit, y seleccionamos la opción Exit Saving Changes.
Como puedes ver, es una operación relativamente sencilla, únicamente hay que quitarse el miedo a trabajar con esta configuración.